El Solitario, sus robos y sus amantes
El retrato que El Solitario hace de sí mismo bascula entre un donjuán libertino y un delincuente libertario. En el libro autobiográfico que acaba de publicar la editorial Txalaparta, Jaime Giménez Arbe, el atracador de bancos que se burló durante 13 años de las fuerzas de seguridad del Estado, dedica muchas páginas a narrar la pléyade de amantes que cayeron rendidas entre sus brazos: desde la frutal Margarita, una adolescente "rubia y guapa que vivía en la calle Virgen del Castañar" de Madrid, hasta la carnal Iris Roberta Martins, la brasileña a la que enamoró a través de un chat de Internet. Fue su última conquista antes de ser capturado, en julio de 2007, cuando iba a dar un nuevo golpe en Figueira da Foz (Portugal).
El primer robo -la primera "expropiación", diría él- lo cometió en 1971, cuando sólo era un quinceañero. Junto con José Antonio Martín Gardoqui, que años después llegaría a ser batería del famoso grupo rockero Burning, desvalijó una tienda de la calle de Jorge Juan, frente a la Casa de la Moneda, y se apoderó de cuatro guitarras y un equipo de altavoces. Eso le costó varios meses de estancia en la prisión de Carabanchel.
http://www.elpais.com/articulo/espana/Solitario/robos/amantes/elpepuesp/20100109elpepunac_4/Tes